Aquí me tenéis una vez más, volviendo a viejos hábitos, aunque más bien es a viejas alegrías. Vuelvo a escribir en este blog después de 3 años de abandono. Lo dejé por que era difícil, requería mucho tiempo y esfuerzo preparar buenas entradas y cada vez me sentía más desilusionado con esta bitácora, con el poco impacto que tenía (creo) y con el tiempo que tenía que invertir.
Esas cosas no han cambiado, pero yo sí. Hay muchas cosas que he vivido que deseo compartir porque me han enriquecido y creo que también serán buenas para vosotros. Estoy cerca de terminar la carrera de Psicología, he estado dando charlas, trabajando con niños con graves trastornos, también con adultos, personas angustiadas que no entienden qué pasa o qué les pasa. He sufrido la pena, el dolor, la muerte, la separación, el miedo, la ansiedad, las noches sin poder dormir y los pensamientos que asaltan tu conciencia y te dejan sin poder ni respirar. He conseguido trabajo, incluso en plena crisis, he viajado, he perdido más de 20 kg después de haber llegado a pesar 120 kg.